La ciencia avanza exponencialmente cada año. No obstante,
no todas las innovaciones que se crean cada día reciben un seguimiento y una posterior
aplicación directa para el beneficio de determinados colectivos en el planeta
que se encuentran amenazados por su situación económica, geográfica o política.
Si bien cambiar hoy el mundo parece una tarea ardua y complicada, también es
preciso apuntar a ciertos motivos para la esperanza en mejorarlo.
Un conjunto de pequeñas acciones pueden consolidarse como
un buen punto de partida para este reto. Mejorar la calidad de vida de ciertos
colectivos, que residen en zonas de difícil acceso, dificultando por
consiguiente la posibilidad de recibir una educación adecuada o un tratamiento
médico necesario en cualquier momento, es posible. Lo es gracias al compromiso
de innovadores y científicos que quieren poner sus creaciones al servicio de
los más necesitados.
Uno de estos ejemplos es la dominicana Paola Santana. Una
de estas personas que dedican todo su talento a crear un mundo mejor. Parte del
resultado de ese esfuerzo lo vemos hoy en la tecnología que ha desarrollado en
Matternet, en Silicon Valley (Califormia) que gracias a un convenio de
colaboración con el BID y e-Mprende (del Parque Cibernético Santo Domingo) se
va a lograr implementar la tecnología dron en la República Dominicana para
hacer que la vida de las personas que residen en localidades de difícil acceso
puedan conseguir medicamentos de primera necesidad gracias a los drones. Esta
tecnología permitirá transportar material médico de primera necesidad (hasta 2
libras) durante más de 20 kilómetros, Un tercio menos de tiempo que la misma
distancia por carretera. El objetivo y la meta es apoyar el bienestar de cada
niño o paciente con el lema de que "cada vida cuenta".
La tecnología dron avanza a un ritmo apasionante, no
únicamente para fines de marketing y comerciales, representa un nueva
revolución industrial. Organizaciones como UNICEF, WHO, Médicos sin Fronteras
se están asociando con empresas como Matternet para que los drones puedan
mejorar la calidad de vida de diversos colectivos necesitados del planeta.
Las organizaciones humanitarias internacionales han reconocido
las tragedias que enfrentan cada día los niños de determinadas regiones
empobrecidas o en vías de desarrollo y el deseo de ayudar a cada niño para
mejorar la calidad de vida de las familias está cada día más presente,
especialmente si disponemos de innovaciones que pueden ayudarles. Con nuevos y
mejores aviones no tripulados, las organizaciones podrán ahora para alcanzar su
objetivo de dar cuenta de las necesidades básicas de todos los niños y hacer
frente a un número significativo de los problemas del mundo, tales como la
reducción de la malnutrición, el HIV, la tuberculosis, la educación de las
familias sobre el desarrollo infantil temprano, ayudando con el embarazo, pre y
atención después al parto.
Mediante la optimización de la tecnología de dron, los
gobiernos podrán eludir sus problemas de transporte, garantizando la entrega
segura y segura de los materiales, con la reducción del tiempo de espera y la
velocidad eficiente, sino que también evitará cualquier violación de la
recolección de datos y el robo de mercancías.
La tecnología dron ha llegado a República Dominicana y a
otros rincones del mundo para quedarse. El uso de los drones en manos adecuadas
pueden marcar una diferencia significativa para mantener la esperanza de un
mundo mejor.
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